TALES DE MILETO
lunes, 28 de septiembre de 2015
Tales
Si quieres saber algo más sobre Tales de Mileto, aquí tienes un breve vídeo que te puede interesar.
TALES DE MILETO
TALES DE MILETO
domingo, 27 de septiembre de 2015
martes, 22 de septiembre de 2015
Textos recomendados para leer este trimestre
Aquí tienes dos artículos, uno sobre Platón y otro sobre San Agustín. Puedes acceder a ellos a través de los siguientes enlaces.
Espero que te sean de utilidad
Espero que te sean de utilidad
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lectura,
Platón
jueves, 17 de septiembre de 2015
MITOS Y "MASS-MEDIA"
"Recientes investigaciones han puesto en claro las
estructuras míticas de las imágenes y de los comportamientos impuestos a las
colectividades por la vía de los mass-media. Este fenómeno se da, sobre todo,
en los Estados Unidos. Los personajes de los comics strips (historietas
ilustradas) presentan la versión moderna de los héroes mitológicos o
folklóricos. Encarnan hasta tal punto el ideal de una gran parte de la
sociedad, que los eventuales retoques impuestos a su conducta o, aún peor, a su
muerte provocan verdaderas crisis entre los lectores; éstos reaccionan
violentamente y protestan, enviando millares de telegramas a los autores de los
comics strips y a los directores de los periódicos. Un personaje fantástico,
Superman, se ha hecho extraordinariamente popular gracias, sobre todo, a su
doble identidad: descendido de un planeta desaparecido a consecuencia de una
catástrofe, y dotado de poderes prodigiosos, Superman vive en la Tierra con la
apariencia modesta de un periodista, Clark Kent; se muestra tímido, eclipsado,
dominado por su colega Lois Lane. Este disfraz humillante de un héroe cuyos
poderes son literalmente ilimitados repite un tema mítico bien conocido. Si se
va al fondo de las cosas, el mito de Superman satisface las nostalgias secretas
del hombre moderno que, sabiéndose frustrado y limitado, sueña con revelarse un
día como un "personaje excepcional", como un "héroe".
La novela policíaca se prestaría a
observaciones análogas: por una parte, se asiste a la lucha ejemplar entre el
Bien y el Mal, entre el Héroe (= el detective) y el criminal (encarnación
moderna del demonio). Por otra parte, por un proceso inconsciente de proyección
y de identificación, el lector participa del misterio y del drama, tiene la
sensación de participar personalmente en una acción paradigmática, es decir,
peligrosa y heroica."
PLATÓN
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Exámenes PAU de Historia de la Filosofía y modo de resolverlos
En esta entrada te dejo los exámenes PAU de Historia de la Filosofía y una explicación de cómo proceder para resolverlo. Espero que te sea de utilidad.
MODELO DE EXAMEN y MODO DE PROCEDER
1. El examen se llevará a cabo mediante el comentario de
un fragmento seleccionado entre alguno de los textos del temario; dicho
comentario constará de las siguientes operaciones, que habrán de realizarse
obligatoriamente por este orden:
a) Resumen del fragmento: 2
puntos.
b) Explicación de dos nociones
presentes en el fragmento: 2 puntos.
c) Síntesis teórica o doctrinal: 3
puntos.
d) Contextualización:
Contextualización del texto en la
obra a que pertenece, otras obras y el pensamiento del autor (1,5 puntos);
Contextualización del pensamiento
del autor en la historia de la filosofía y/o en la época (1,5 puntos)
2. Criterios
generales
Resumen del fragmento
De forma concisa, sin superar un
máximo de 15 líneas, el alumno efectuará las siguientes operaciones, aunque no
es preciso seguir necesariamente el orden propuesto: en primer lugar, señalará
el tema o problema principal específicamente planteado en el fragmento,
recogiendo a continuación las ideas o tesis básicas que contiene y, por último,
aunque no es obligatorio que sea de forma separada, la relación entre las
mismas.
El tema o problema principal
específicamente planteado puede a su vez remitirse al más amplio en que sea
posible encuadrarlo.
En las ideas o tesis básicas,
conviene especificar si lo son del autor u objeciones a ideas o tesis de otros
autores.
En el caso de un texto narrativo
es preciso recoger los sucesos narrados y los símbolos o metáforas presentes.
Puntuación: hasta 0.5 puntos por
la indicación del tema o problema; hasta 1.5 puntos por la exposición de las
ideas o tesis básicas (sucesos narrados, símbolos o metáforas en su caso) y su
relación.
Explicación de dos nociones
presentes en el fragmento
El alumno explicará el significado
de estas nociones (sean conceptos, símbolos o ideas) teniendo como referencia
su uso en el fragmento. No se trata simplemente de definirlas; en la mayor
parte de los casos, es posible asociarlas o contraponerlas entre sí para
aclarar mejor su significado. Con el mismo fin, puede ser conveniente comparar
éstas con otras nociones del autor o de otros autores.
Síntesis teórica o doctrinal
El alumno expondrá un tema que
guarda relación, directa o indirecta, con el fragmento propuesto; por tanto,
habrá de tener en cuenta lo que dicho fragmento dice o sugiere, pero no tendrá
que limitarse al mismo. Tomará en consideración el pensamiento del autor,
incluso el de otros autores, en la medida en que, por afinidad o por contraste,
contribuya a una comprensión más clara del tema que desarrolla.
Contextualización del texto
El alumno, por último, remitirá el
texto y el pensamiento del autor a los dos siguientes marcos de referencia, de
amplitud creciente:
a) Remisión del texto a la obra a que
pertenece (división o estructura, forma, temas, significado general, etc.),
otras obras y el pensamiento del autor
(pueden indicarse aquí los temas
característicos, la evolución y significado de su filosofía, incluso los
aspectos más relevantes de su vida, etc.).
b) Remisión del pensamiento del autor a la
historia de la filosofía (escuela o movimiento en que cabe encuadrarlo,
relación con otros autores, influencias, etc.) y/o a la época en que le tocó vivir (sociedad, cultura, ciencia,
etc.).
Si pinchas sobre los siguientes enlaces puedes encontrar los exámenes de este año, tanto en la convocatoria de Junio como de Septiembre.
lunes, 14 de septiembre de 2015
Vídeo reflexión
Reflexiona sobre el
contenido de este vídeo y comenta qué te parece la "insuficiencia lectora" que vivimos, por qué hemos llegado a esa situación y si vale la pena hacer algo para remediarlo.
Consejos metodológicos
Búsqueda de obras e importancia de la
edición.
La filosofía sigue estando, principalmente, en los
libros. Es importante desenvolverse bien con ellos, saber que puede haber
distintas ediciones, distintas traducciones, traducciones polémicas. Para
empezar a familiarizarse con los libros es importante aprender la diferencia
que hay entre obra, edición y ejemplar. De una obra puede hacer distintas
ediciones. Cada una de estas ediciones puede incluir alguna corrección del
autor, alguna introducción de otro autor que la edición original no incluyese,
fotografías, una encuadernación mejor (o peor, si se trata de una edición más
económica). De cada una de las ediciones se hace un número determinado de
ejemplares. Cada uno de los libros que tenemos son ejemplares de ediciones (en
ocasiones solo existe una edición) de obras.
Lectura filosófica.
La lectura filosófica ha de ser distinta a la de
una novela. Puedes estar mucho tiempo con un párrafo. Puedes seguir sacando
“jugo” a algo que ya has leído y has creído entender. Puedes entender algo
nuevo después de muchas relecturas. Es por esto que, a veces, se parece más a
lo que hace un detective que busca pistas en la escena del crimen o un
arqueólogo que descifra un jeroglífico, que a lo que hace el lector de una
novela.
Introducción a la hermenéutica.
La hermenéutica (del griego ερμηνευτική τέχνη,
hermeneutiké tejne, "arte de explicar, traducir, o interpretar") es
el conocimiento y arte de la interpretación, sobre todo de textos, para
determinar el significado exacto de las palabras mediante las cuales se ha
expresado un pensamiento.
Se considera que el término deriva del nombre del
dios griego Hermes (En la mitología griega Hermes -en griego antiguo Έρμῆς- es el
dios olímpico mensajero, de las fronteras y los viajeros que las cruzan, de los
pastores y las vacadas, de los oradores y el ingenio, de los literatos y
poetas, del atletismo, de los pesos y medidas, de los inventos y el comercio en
general, de la astucia de los ladrones y los mentirosos) el mensajero, al que
los griegos atribuían el origen del lenguaje y la escritura y al que consideraban
patrono de la comunicación y el entendimiento humano; lo cierto es que este
término originalmente expresaba la comprensión y explicación de una sentencia
oscura y enigmática de los dioses u oráculo, que precisaba una interpretación
correcta. Otros dicen que el término hermenéutica deriva del griego
ermēneutikē, que significa "ciencia", "técnica", y que
tiene por objeto la interpretación de textos religiosos o filosóficos,
especialmente de las Sagradas Escrituras, y del sentido de las palabras de los
textos, así como el análisis de la propia teoría o ciencia volcada en la
exégesis de los signos y de su valor simbólico.
Comentario de texto.
Comentar textos es una de las actividades más
habituales en filosofía. Cuando se comenta un texto hay que estar atento a si
se nos formula una pregunta en concreto, a la que habría que contestar apoyando
la respuesta con fragmentos del texto. De no ser así, se trata, básicamente, de
decir, con otras palabras, qué dice el texto y, sobre todo, explicar y ampliar
su significado a partir de los conocimientos que se tenga del autor, la obra o
el contexto histórico y cultural de la misma. Se puede caer en dos errores que hay que
evitar. Un comentario debe hacer referencia a partes del texto(Ej.:”...en la
linea cinco, el autor nos habla de...”) pero no puede ser una repetición del
mismo. Tampoco podemos limitarnos a parafrasear el texto, es decir, simplemente
decir lo mismo con otras palabras, porque se nos pide un comentario. Por
último, otro error habitual sería el de tomar el texto como pretexto para decir
lo poco que sabemos del autor o la obra (vamos, que ponga lo que ponga, yo voy
a poner lo que me sé, hable de eso o no, el texto). Lo iremos viendo.
Toma de apuntes.
Debes tomar nota de todo aquello que se explique o
se hable en clase y no esté en los apuntes, especialmente de todo aquello que
puede ayudarte a una mejor comprensión del tema a la hora de estudiar, ya sea
una aclaración, una ampliación o cualquier dato relevante.
Búsqueda de información.
Puedes (y de debes) buscar información por tu
cuenta que amplíe los apuntes y lo explicado en clase, pero deberás contrastar
la información con el profesor. De no ser así, corres el riesgo de
malinterpretar (o extraer información errónea de internet o algún libro) datos,
y que la nota, en lugar de subir, se vea reducida.
Realización de vocabulario y reseña
biográfica de autores.
Realizaremos un pequeño diccionario filosófico que
incluirá filósofos antiguos (en la 1ª evaluación), modernos (en la 2ª
evaluación) y contemporáneos (en la 3ª evaluación). Cada autor irá acompañado
de una pequeña explicación. Y definiciones de
una serie de términos que se irán proponiendo al hilo de las
explicaciones.
El ensayo y la disertación
filosófica.
Uno de los formatos más habituales de la filosofía
es el ensayo. El ensayo es, según la
wikipedia, la interpretación o
explicación de un tema —humanístico, filosófico, político, social, cultural,
deportivo, por tomar algunos ejemplos—, sin que sea necesariamente obligado
usar un aparato documental, es decir, de manera libre, asistemática y con
voluntad de estilo. La disertación
sería algo similar, pero un poco más “encorsetado”, sujeto a una investigación
previa, y con un carácter más expositivo, hecha para ser expuesta en clase, una
conferencia, etc. Trabajaremos ambas cosas y realizaremos exposiciones orales
que nos permitan adentrarnos en el apasionante mundo de la filosofía.
Una advertencia
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antropología,
ciudadanía,
Filosofía
Filosofofía y ciudadanía
“Si hay que
filosofar, es preciso filosofar, y si no hay que filosofar,
es preciso
igualmente filosofar; así pues, en cualquier caso es necesario filosofar. Si
existe efectivamente
la filosofía, todos estamos obligados de cualquier forma a
filosofar, dado que
existe. Pero, si no existe, aun en este caso nos vemos obligados a
investigar por qué
no existe la filosofía; pero, investigando, filosofamos, porque
investigar es la
causa de la filosofía” ARISTÓTELES
Más que la simple constatación de la desaparición
de la metafísica, la descripción hecha por Hegel —hace ya casi dos siglos—
parece haber sido una profecía sobre su futuro y definitivo olvido: “Lo que antes… se llamaba metafísica
(Filosofía) fue, por así decir, totalmente arrancado de raíz y ha desaparecido
del conjunto de las ciencias.” ¿Dónde se oyen o pueden oírse todavía las
voces de la antigua ontología, de la psicología racional, de la cosmología e
incluso de la antigua teología natural? ¿Dónde encontrarían todavía interés,
por ejemplo, indagaciones sobre la inmaterialidad del alma, sobre las causas
mecánicas y finales?
Efectivamente, hoy día, tras el neopositivismo y el
pensiero debole —por no citar sino dos casos extremos—, se habla del fin
de la filosofía en general: ya no hace falta siquiera molestarse en mencionar
la total liquidación de ese saber de otros tiempos que recibió el curioso
nombre de metafísica. Sin embargo, uno de los que establecieron —hace milenios—
las “reglas” del quehacer filosófico, indicó que, si alguien se atreviera a
negar su existencia y validez, se vería indefectiblemente envuelto en un
discurso de estricto carácter filosófico —quizá por eso, hoy muchos no niegan
la filosofía, simplemente la ignoran—, e incluso se atrevió a añadir que el objeto
de ese saber siempre sería tema de investigación.
Es, pues, claro que, desde el mismo nacimiento de
la filosofía, no han faltado quienes le hayan negado el derecho a la
existencia, como si ella no fuese más que una vana e inútil ilusión de la razón. Sin embargo, su
vitalidad multisecular es una buena prueba de que algo muy especial pasa. Más
aún, no sólo en tiempos pasados, cuando era llamada —sin ironía— reina de las
ciencias, se la consideraba el saber fundamental, sino que incluso en nuestro
siglo, algunos —y no precisamente los más torpes— se han atrevido a decir que
en ella se juega el destino de Occidente y que la crisis vital de la humanidad
europea es, en definitiva, una crisis filosófica, en la que el cientifismo, el
escepticismo y el irracionalismo han quebrado la confianza en la razón, al
negar la posibilidad de un conocimiento estricto del mundo real.
Sin embargo, en todas las épocas, en todos los
lugares, se repiten determinadas cuestiones. Son una especie de obsesión del
ser humano. Son preguntas relacionadas, normalmente con el concepto de ser:
¿por qué existe todo? ¿Ha de existir para algo? ¿Podría no haber nada? ¿Existe
Dios? ¿Existe el alma? Así, tratando de dar respuesta a estas preguntas,
llegamos a otras que, a su vez nos llevan a otras. Tras muchas preguntas,
llegamos a algunas respuestas, aunque, desde luego nunca a todas. La filosofía
va planteando y respondiendo preguntas, pero cuando estas se van complicando,
cuando de un mismo asunto, surgen multitud de preguntas y respuestas, entonces
parece que nace una ciencia específica que se ocupa de ello, y deja de ser
competencia de la filosofía el estudio de las preguntas y respuestas de ese
ámbito del saber.
La ciencia y la filosofía fueron exactamente lo
mismo hasta casi el siglo XVII, pero en ese momento, el ser humano cree que se
acerca, más que nunca, a respuestas muy exactas, con poco error. La ciencia
“pretende” ser eso, un tipo de saber que proporciona respuestas más certeras
que otros tipos de saber. Pero no toda respuesta a toda pregunta es filosófica
o científica. Se entiende que la filosofía nace cuando la respuesta a las
cuestiones es de tipo racional. La ciencia también da respuestas racionales
pero, además, estas siguen un esquema, un orden. Siguen lo que se conoce como
Método Científico.
Pero cabría discutir si cuando una respuesta es
científica deja de ser filosófica. Esto es, discutir si la filosofía solo puede
encargarse de aquellas cuestiones que la ciencia “todavía” no puede resolver
(ética, filosofía del lenguaje, metafísica...) o también debería de hacer una
función de enlace, puente o conexión entre las distintas disciplinas
científicas. Incluso, si los filósofos deben trabajar codo con codo con los
científicos, estudiando y aplicando, por ejemplo, estructuras generales de unos
ámbitos en otros, para ayudar así a un mayor avance de la ciencia.
A lo largo de este curso nos familiarizaremos con
las principales cuestiones y las respuestas a las mismas que ha planteado y plantea
la filosofía, así como con algunos de los autores más influyentes a lo largo de
su historia.
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